septiembre 03, 2007

EXCURSIÓN A LAS HOCES DEL ESVA


El domingo 2 de Septiembre varios amigos de Amisalas hicimos una de las rutas más espectaculares y dificultosas para un senderista de las que tenemos en Asturias, la de Las Hoces del Esva.
Nos dirigimos a San Pedro de Paredes con la intención, en principio, de hacer la ruta más sencilla, la que va al embalse de la antiua central eléctrica, pero allí mismo cambiamos de opinión y nos decidimos por la más difícil, la que sube a las brañas de Pena, Adrado y Relloso y luego baja hacia las Hoces del río Esva.
El camino de inicio es el antiguo de San Pedro de Paredes, utilizado por los vaqueiros para subir a las brañas de Pena, Adrado y Relloso.
La primera parte del itinerario fue la más dura ya que la senda presentaba una fuerte pendiente y alguno de los senderistas las pasó canutas para llegar a lo más alto. Esta ruta es antiquísima y era la que seguían hasta hace muy poco tiempo los vaqueiros de alzada de Valdés para ir con sus vacas a los puertos de los pastos de verano en Tineo, Cangas del Narcea y Somiedo.A lo largo del camino, encontramos varios "cortines" (construcciones circulares de piedra que impiden el paso de los osos y otros animales) para proteger los colmenares
Desde lo más alto bajamos por un antiguo sendero que nos llevó hasta Bustiello de Paredes desde donde continuamos a San Pedro de Paredes por la carretera, inicio y final de nuestro recorrido.
Antes de llegar a Bustiello pasamos cerca de la garganta cavada por el río Esva, entre las Sierras de Villagermonde y Andornoso, que origina un estrecho paso con paredes de hasta 500 metros de altura. Estas paredes están cubiertas por un robledal mixto de carbayos que en el fondo del valle da paso a una formación ribereña de alisos y, aunque no llegamos a verlas, en el Esva tiene su hábitat una importante población de nutrias